Rant: Películas VS Libros VS Comics

Leyendo: Marionetas de la Sombra - Orson Scott Card
Audioleyendo: The Rule of Two - Drew Karpyshyn, narrado por Jonathan Davis
Última Película Vista: Hannibal
Escuchando: Mary Elizabeth McGlynn - One More Soul To The Call



Hoy me subiré al tren del mame geek. En un punto específico: ¿Qué pedo con esa gente que exige que el libro y la película sean iguales o con esos cómics que parecen ser escritos con una lista de todos los hoyos que hay en los guiones?

Soy el primero en defender que cuando se esta a punto de grabar resulta que no tiene mucho sentido lo que esta escrito y hay que buscar alguna manera de decir lo mismo con diferentes elementos, contar la misma historia con otras palabras, utilizar diferente lente o ángulo que permita ser más eficaces, eficientes o que minimice el riesgo de errores o riesgos, entiendo que la producción es incapaz de preverlo todo y que a pesar de eso tiene la responsabilidad de responsabilizarse de todo. Esto es algo que sucede y que al final del día depende de lo mismo: un guión, una historia, alguien que tenga claro lo que sucede. Dice Tarantino hablando de su experiencia con Pulp Fiction y parafraseo: "Todos eran tan buenos en lo suyo y yo sólo soy un mal actor, pero tengo algo que ellos no para hacer mi película: Soy el que mejor que nadie conoce la historia y lo que quiere lograr al final".

Cuando salió El Señor de los Anillos, evidentemente hubo quienes se molestaron o que hubiesen preferido que se mostraran partes francamente irrelevantes para contar la historia, osea los puntos de inflexión. Aunque haya partes calcadas para entretenimiento de los fans y autores; lo importante se contó de una manera distinta. Personajes y situaciones se omitieron o modificaron por beneficio de la lectura visual y narrativa, pero los puntos de inflexión se mantuvieron.

En El Resplandor tenemos algo similar pero con intenciones y resultados opuestos. Una sinopsis del libro y la película serían similares si no es que casi iguales, pero si vemos la película y leemos el libro; en realidad son historias bien distintas y los que prefieren el libro tienen tantas razones como los que preferimos la película. Y todo en pos de lo que los autores querían contar, no por los personajes, no por la narrativa, ni siquiera por los lectores o los espectadores, sino por los autores mismos. Tal vez es la prerrogativa de tener ventas aseguradas. La libertad artística. Tal vez es la arrogancia de las personalidades. De cualquier manera ambas obras son más que productos bien hechos, arte bien ejecutado.

No se pueden pasar por alto los remakes, hard y soft remakes, en los que se cuenta la misma historia con diferentes personajes, los mismos detalles y los mismos puntos de inflexión, si bien el viaje es distinto y hay demasiadas veces en el que el look and feel se sobreproduce o se ignora por completo. Aquí es cuando vemos el branding en su más grande expresión: Departamentos de producción en serie, productoras corporativas sin imaginación o escrúpulos. Star Wars - The Force Awakens, Ghostbusters o Robocop son ejemplos dramáticos de esto.

Y es precisamente en estos "productos de consumo", estas historias con emociones de segunda mano, es donde vemos una completa falta de interés. Donde vemos cómo audiencias aplauden a la falta de imaginación y las hordas geeks se enfrascan en conversaciones sobre puntos diseñados para mantener su consumo asegurado, adictos a la emoción, víctimas del diseño, mentes corroídas por subproductos como comics que pareciera siguen un listado de hoyos de continuidad en las películas que deben ser rellenados, mientras las películas son hechas con estas ventas futuras en mente. Historias que no se pueden contener en si mismas por que se caen en sus personajes torpemente ejecutados, en monstruos sin mente en su propio Universo sin alma, vendimía de ambulantaje callejero que se quiere hacer pasar por nuestro.

Aquí es donde realmente se hacen relevantes las discrepancias y los por qués se vuelven importantísimos. Me molesta bastante que Universos construidos con tanto amor sean reducidos, prostituídos a lo que llaman "franquicias" y además haya tantos que nunca fueron amados en la mente de sus autores y lo más cercano que tengan sean esas ignorantes masas de gente que es la cúspide del consumismo del que nos advirtió Tyler Durden y, curiosamente paradójico, George Lucas.

En definitiva, películas como Jurassic Park son mucho más icónicas que los libros de donde salieron, libros como The Lord of The Rings son queridos como sus películas, libros como 1984 son trascendentales mientras su película se va perdiendo en youtube poco a poco. Siempre habrá pequeñas mentes discutiendo sobre qué tanto se pierde del libro en la película y faltan de analizar qué tanto interpreta la película al libro y siempre habrá pequeños consumistas dispuestos a tragarse el bukake de cualquier merchandising de cualquier corporación y franquicia.



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